Idioma tigriña

Idioma tigriña
El idioma tigriña es una lengua etiópica y desciende del ge'ez, que es una lengua semítica meridional. El nombre de la lengua corresponde al nombre de la provincia de Tigray, en Etiopía. Aparte de ser la lengua moderna que más se parece al ge'ez, se sabe poco sobre la historia lingüística del tigriña, pues todos los documentos escritos son relativamente recientes, siendo que antes todo se escribía en el antiguo idioma ge'ez. Solamente hay raras excepciones en escritos anteriores al siglo XIX, que es cuando algunos viajeros europeos registraron listas de palabras en tigriña. El códice Loggo Sarda, hallado en la iglesia de Sarda, en Etiopía, es probablemente la primera producción de literatura escrita y data del siglo XIX.

El tigriña es hablado mayoritariamente por la población de la provincia de Tigray, en Etiopía, y en las tierras altas de Eritrea (en las provincias de Akkele Guzay, Serae y Hamasien). Además, el tigriña se habla, principalmente como segunda lengua, en el resto de Eritrea.

Se calcula el número de hablantes de tigriña en unos 6,7 millones de personas, de los cuales alrededor de 2 millones viven en Eritrea, lo que supone cerca del 50 % de la población total de ese país.

El tigriña es, junto con el árabe, el inglés y el italiano, una de las lenguas oficiales de Eritrea, siendo el principal medio de enseñanza, literatura y comunicación masiva en dicho país.

El tigriña es el tercer idioma más hablado de Etiopía, donde cuenta con su espacio en la televisión nacional. Para escribir en tigriña se usa el silabario etiópico proveniente del ge'ez. El orden de la palabra es normalmente sujeto, complemento y verbo.

En la versión eritrea del tigriña hay un amplio vocabulario italiano, producto de la prolongada colonización de Italia en este país. Esta presencia es mucho menor en el tigriña del norte de Etiopía, país que se mantuvo libre del colonialismo europeo. También hay otras diferencias de acento y vocabulario entre el tigriña eritreo y el tigriña etíope. No obstante, estas variaciones no obstruyen la comunicación, siendo tal vez comparables con las que hay entre el español de unos países y de otros.

En todo el territorio de habla tigriña la influencia reciente del amhárico (idioma nacional de Etiopía) sobre el tigriña es muy amplia, aunque no es una influencia muy foránea, ya que ambos idiomas tienen la misma raíz, el mismo alfabeto, gramáticas y vocabularios muy parecidos, marcando una diferencia tal vez comparable con la que existe entre el español y el francés.

País
  • Eritrea
    Eritrea, oficialmente el Estado de Eritrea (ሃገረ ኤርትራ; دولة إرتريا), es un país situado al noreste de África. Limita al norte y al oeste con Sudán; al sur con Etiopía y Yibuti; el este del país posee una extensa costa con el mar Rojo. Forman igualmente parte de Eritrea las islas Dahlak, un archipiélago de coral cercano a la costa de Massawa. Su nombre proviene de la antigua colonia italiana Eritrea, creada el 1 de enero de 1890, llamada así por el Mare Erythraeum («mar Rojo», en latín) a su vez del griego «erythros», que quiere decir «rojo». Se independizó en 1993 de Etiopía. Su capital y ciudad más poblada es Asmara.

    El reino de Aksum, que abarcaba gran parte de lo que constituye Eritrea y el norte de Etiopía, surge hacia el o y adopta el cristianismo a poco de surgir esta religión. En tiempos medievales gran parte de Eritrea queda bajo el dominio del reino Medri Bahri, una parte forma la República de Hamasien.
  • Etiopía
    Etiopía (ኢትዮጵያ), oficialmente la República Democrática Federal de Etiopía (የኢትዮጵያ ፌዴራላዊ ዴሞክራሲያዊ ሪፐብሊክ), antiguamente conocida como Abisinia, es un país sin litoral situado en el Cuerno de África. Las estimaciones demográficas a 2021 lo sitúan como el segundo país más poblado de África, solo por detrás de Nigeria y el duodécimo a nivel mundial, así como el país sin litoral más poblado del mundo. Su capital, así como su ciudad más grande y poblada, es Adís Abeba. Limita al norte con Eritrea, al noreste con Yibuti, al este con Somalia, al sur con Kenia y al oeste con Sudán y Sudán del Sur.

    Etiopía, donde se introdujo tempranamente el cristianismo, es el único caso entre los países africanos que nunca ha sido colonizado, y mantuvo su independencia durante el reparto de África, excepto por un periodo de cinco años (1936-1941), cuando estuvo bajo ocupación italiana. Con la independencia de Eritrea en 1993 Etiopía perdió su salida al mar.